Es necesario hacer cambios en las rutinas del hogar para evitar que los chicos engorden

Según un estudio aquellos padres que lograron reducir las horas que los niños pasaban frente al televisor o delante de las computadoras y ganando horas de sueño hizo que los chicos no ganarán peso.

Según un estudios aquellos padres que lograron reducir las horas que los niños pasaban frente al televisor o delante de las computadoras y ganando horas de sueño hizo que los chicos no ganarán peso.

Nadie dice que a los chicos hay que quitarles todo el tiempo de diversión que tengan, pero es importante que sean los adultos los que consigan un equilibrio y así poder lograr que jueguen, se diviertan y además eviten ganar peso que es justamente lo que no buscamos.

Tal como lo reveló un estudio científico los padres que limitaron el tiempo de los niños delante de la televisión y aumentaron las horas de sueño y consiguieron que el aumento excesivo de peso de los niños fuera menor

“Al mejorar las rutinas dentro del hogar se redujo el riesgo de la obesidad infantil”, aseguró una de las investigadoras del estudio, la Dra. Elsie Taveras, jefa de pediatría general en el Hospital General Pediátrico de Massachusetts, en Boston.

Según se pudo saber casi el 17 por ciento de los niños y adolescentes estadounidenses son obesos, tal como lo relevan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. Y los niños que proceden de hogares con menos ingresos están particularmente en riesgo.

El equipo contó con 121 familias con hijos de 2 a 5 años de edad y asignaron a la mitad a hacer estos cambios mínimos con la ayuda de “consejeros de salud”, que realizaron unas pocas visitas a la casa y unas llamadas telefónicas para llevar a cabo el seguimiento de estas modificaciones en sus hábitos.

Después de seis meses, los niños del grupo de intervención dormían aproximadamente tres cuartos de hora más por la noche y veían la televisión una hora menos los fines de semana. Con esos cambios mínimos los chicos ganaron masa corporal, crecieron en altura pero no en grasa, es decir que no aumentaron de peso.

Los cambios de hábitos para que los chicos durmieran más a la noche era simplemente leerles un libro a la noche, bañarlos antes de acostarlos, todo lo que ayudaba a crear un clima apto para un buen descanso.